He estado esperando que regreses y pases por mí nuevamente, pero lo único que pasa es el tiempo y aunque tengo una pena enorme, creo que es lo mejor que podemos hacer, olvidarnos, si es que ya no lo hiciste tú ¿a donde se nos fue todo el amor? el mío sigue intacto, sobre tu amor no puedo decir mucho, siempre tan intermitente y a veces muy vacío, estos últimos días te he extrañado demasiado, pero no hay absolutamente nada de que hablar, no tengo razón para escribirte o viceversa y puede ser el inicio de todo este fin que de a pocos construimos, tal vez ya sea hora de dejar pasar no solo los días si no todo el amor que tenía para darte.
Hoy en un día más extrañándote quiero contarte que manejo muy bien, sigo hablando con esos amigos que te producían celos y de los que siempre me reí, tomo más agua que de costumbre, han cambiado algunas cosas, pero no muchas, las que sabes siguen igual, me iré de viaje muy pronto, aprendí a pedir perdón más de lo que crees, ahora tomo las infusiones sin azúcar y sigo saliendo algo tarde del trabajo.
Nunca fuiste tú, siempre fui yo la que quiso de más y por eso nos fallamos, porque debíamos de querernos igual, pero no importa, fallar es parte del proceso y aprender es lo único que me ha gustado desde que te conocí, posiblemente en el pasado todo fue felicidad y ahora ya no sé que pasará, a estas alturas de la vida ya no importa mucho la verdad, pero de algo si estoy segura: En algún universo paralelo nuestra historia terminó bien.
Te extraño
No hay comentarios:
Publicar un comentario