Ayer escribí en mi mente todo lo que quería decirte hoy, no he podido zanjar muchas cosas contigo, la primera es: ¿por qué te amé tanto? - hoy lo voy a responder - tengo otras cosas más atoradas en el corazón, y es que las tengo ahí, porque ahí es donde alojé tu recuerdo, también en el alma, pero esa es otra historia.
¿Por qué te amé? quizás no haya una respuesta exacta para todo lo que pude sentir por ti, y lo pongo en pasado, porque mi amor se reinventó todos los días ¿recuerdas? algún día te dije eso, mi amor era fe y esa fue mi mayor demostración de confianza, todos los momentos que viví contigo no tuvieron fotos, pero coleccioné recuerdos en mi alma, si cerrara los ojos, ahí estás estrechándome en un abrazo, no puedo creer que esté sin ti y haya sobrevivido, entonces caí en cuenta que me tocó seguir viviendo como si no sintiera tu existencia y así fue como pasaron los días y entendí que debía de seguir.
He tratado de entender todo desde el primer día, mi fuerza de voluntad se resquebrajó muchas veces, pero en ninguna dudé de seguir adelante, también fuiste parte de ese proceso, de la experiencia más amarga de tener que olvidarte, era triste, pero había que seguir y también que llorar, había que llorar lo que apretaba en el corazón, daba igual si no sabía el motivo, qué más daba, solo era tristeza y se tenía que ir de alguna forma, como no había otra, solo quedaba llorar y así siguieron pasando los días, las penas se aminoraban y el sol volvía a salir, entonces decidí que no quería recordarte con pena, sino todo lo contrario, si tanto amor había sentido, así te recordaría, no quería ahogarme más en lágrimas, si no en recuerdos lindos, quería aprender a quererte sin estar, quería aprender a superarte sabiendo que existías, cambié la estrategia y quizás ahí pude lograr más, te mentiría si te dijera que no me muero por saber en donde estás, qué haces y si duermes bien, pero no importa, mi corazón sabe que estás bien, y eso vale, es lo único que vale.
No quiero llorar escribiéndote esto, porque sé que algún día lo vas a leer, quiero que tengas la seguridad de que te vi partir hacia un camino en donde no estaba yo, pero que no me afligí, fue difícil, todo fue difícil, pero no fue imposible dejarte, aprendí a vivir con tu ausencia, he pensado mucho y si ¿Dios lo quiso así? ¿quizás no? entonces aunque roto mi corazón aprendí.
Te alejaste y me tocó vivir así, ahora un poco más madura puedo decirte que no te guardo rencor, cómo te guardaría rencor, si de tu mano aprendí a tocar el alma, si contigo aprendí a besar, si a tu lado sentí lo que era el amor, no tendría sentido, pero aunque mucho costó hoy puedo decirte que finalmente te olvidé, no sé si sea la última nota que te escriba, hace meses también escribí lo mismo y aún sigo aquí, es parte de la forma en que encontré para aprender a dejarte ir, no sé si me amaste de verdad, solo sé que yo te quise y eso me reconforta, no importa ya que pasó, no quiero respuestas a todas mis preguntas, no quiero saber qué pasó y por qué no te quedaste, solo quiero que estés bien, quizás esta es mi última prueba de amor, quizás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario