Créeme

Hoy tengo ganas de escribirlo todo, porque todo siempre me lo guardo, pero hacer esto me baja el amor, la tensión, me libera la vida, estoy escuchando a Park Joung Won y siento más calma.

No sé manejar mis sentimientos, los tengo pero no los digo, y no porque no quiera si no porque no sé cómo hacerlo, tanto mal me hizo guardarme todo antes, que ahora no sé cómo decirle a alguien que me importa tanto, pero sé que lo sabe y lo siente y eso apacigua mi pena, te pienso, te quiero, pero no te lo digo para no cargarte, esa es mi forma de demostrar amor, suena mal, se lee mal y sé que está mal, pero no puedo hacerlo diferente, no quiero responsabilizar a nadie de mis sentimientos, no tengo la fórmula perfecta para encajar con nadie y aún así encajé con tus miedos y tus preguntas.

Quiero irme a la otra orilla, esa donde estás tú, sentirme cerca pero no quiero abrumarte, entonces me re pregunto si sigo haciendo bien las cosas, pero en el fondo sé que no, créeme si te digo que te quiero, nunca lo he dicho tantas veces.

Me re pregunto si puedo sentirme tan feliz tantas veces y no obtengo respuesta, entonces está bien, antes me preguntaba todo y tenía una respuesta, por eso me iba mal, porque la pensaba demasiado, regresemos al principio, vayamos más despacio, pero más decididos, en verdad no quisiera retroceder nada, todo así está bien, con inquietudes y exactitudes, con idas y venidas todo está bien.

Créeme si te digo que te quiero, te pienso y te leo, nunca lo he dicho tan sincero.

No hay mal que dure cien años

Era verano pero yo traía una blusa manga larga porque toda mi ropa estaba sucia y no tenía que ponerme, no había cuadrado bien mis días y no tenía otra opción, salí apresurada, para eso nosotros ya habíamos hablado antes, no sabría cómo explicar cómo empezó todo esto pero de algo estoy completamente segura, nunca faltó amor desde el primer día, creo que por eso terminamos por exceso del mismo, pero esa ya es otra historia.

Llegué tarde y tenía mil cosas que hacer, no le di importancia durante el día, me escribió, hablamos y nos vimos, desde ese día no dejamos de hacerlo hasta otros 1824 días más.

Nunca peleamos, me adapté, me acostumbré, entendí y siempre fui la que cedía a todo lo que podía hacerle bien a la relación,por amor, porque no me gusta pelear, podría tener un sin fin de razones en realidad, pero no sé qué más podría poner. Y así fueron pasando los años, no dudo que me haya amado o querido, pero era siempre yo la que quería más y era obvia la diferencia pero en ese entonces no me daba cuenta y dejaba que todo pasara, porque podría justificarme en el amor, y es la única verdad que tengo.

Lo amaba como a nadie, lo veía y sentía mariposas en el estómago entonces era amor, nunca me había pasado y estaba enamorada. Él me quería es cierto, pero tanta era su seguridad que no lo hacía notar, entonces me dolía, pero yo no hice nada por cambiar eso, no traté tampoco de hablarlo, porque no quería discutir y quizás ahí empezó mi problema.

Nunca fui completamente sincera con él, siempre le decía que todo estaba bien y era mentira, me mentía y le mentía a él, que bien me habría hecho un poco de sinceridad, yo sabía que me quería pero no me lo demostraba entonces no hice nada.

Pasaron los años y mi amor nunca más fue el mismo, así como me adapté a ser yo quien quiera tanto, también me acostumbré a su desamor y a su manera fría de ser conmigo, me adapté porque no quería hacer problemas, porque tenía mucho trabajo, que sé yo. Un día un poco harta de todo esto le dije que no podía continuar así, terminé con mi primer amor porque me explotaba el corazón y él no me demostraba lo mismo, aceptó mi decisión como quien se deshace de las cosas y me dejó ir, me sentí mal, duró un año superarlo; con su presencia intermitente lo superé y ahora soy libre de él y de su recuerdo.

No sé exactamente en qué momento dejé de amarlo, pero estoy segura que fue cuando empecé a soltar recuerdos, cuando dejé de llorar al escuchar su canción. Hace un año me liberé de todo ese gran amor y del peso que sentía, más tranquila, con menos euforia por verlo y un total desinterés puedo escribir sabiendo que lo dejé ir. 

Hace un año

Hace algunos años tenía la necesidad de apuntar todo lo que me pasaba, era una suerte de recordatorio de las cosas buenas que sucedían, sentía que el corazón se apagaba y las volvía a leer, he tardado mucho en borrar todas esas notas, alimenté ese vacío con objetos, gente circunstancial y con muchos recuerdos, pero todo lo hice mal porque aún así no olvidaba, pero era un proceso y aunque ese proceso duró más de la cuenta me enorgullece decir que ya todo pasó, que esos apuntes ya no están y que la canción que me anudaba la garganta ya no tiene esa misma sensación.

Hoy escucho canciones y ninguna me recuerda a nada, es una especia de borrón y cuenta nueva, entonces caí en cuenta que si existe eso, que si logras eliminar recuerdos, por muy buenos que hayan sido todo se borra y sigues adelante con vacíos, pero sigues y lo mejor (eso creo) de todo es que no quieres regresar.

Podría decirte que lo logré, que este escrito es para ti y que hace casi un año ya nada es lo mismo, pero esta vez no escribo para nadie, solo para mí, quiero volver a leerme y saber que lo logré, que no importó cuánto duró todo, se logró y eso ya estaba bien. 

Voy a cambiar el play list que tengo porque ahora mismo voy a entrenar, aunque antes de irme quiero terminar de escribir: “pero de algo estoy completamente segura, ya nada nunca volverá a ser como antes y eso suena bien, porque traerá abriles más bonitos.”

Día 44

Hay días en los que te golpea la realidad como una avalancha de sentimientos, ayer todos corríamos en casa llamando, hablando, todos queríamos saber cómo estabas y no teníamos respuestas, ayudamos desde nuestro espacio, algunos rezando, otros teniendo acciones concretas, pero todos con el corazón y pensando que algo podemos hacer por ti.

Te cuento que esta dura la situación para todos, yo me he acostumbrado a estar en casa, no salgo si no es para lo necesario, trabajo mucho más ahora, me ahogo de trabajo, pero lo bueno es que hay, entonces no es una queja si no un comentario, en estos días que se han tornado largos y a veces muy buenos he entendido que son pocas las personas que realmente son importantes, también he podido entender que las enfermedades golpean, y golpean muy duro, no importa si tienes o no dinero, solo viene y ya, no te avisa, no te dice nada.

Hoy te escribo porque siempre te he recordado y desde mi trinchera estoy haciendo de  todo para que estés bien, te escribiría más, pero los sentimientos sobran, no sé si algún día lo dijiste tú, pero “con la familia para las que sea” 

Como siempre y desde niña, todo mi cariño. 

El check list

Hay una lista de cosas que quisiera hacer contigo, la primera y la más importante es dormir juntos, quiero abrazarte tanto que me digas basta, aunque no creo que hagas eso porque también me quieres ¿cómo lo sé? - en realidad podría darte mil hipótesis de todo esto y creo que no tengo ninguna respuesta, pero, lo sé y eso está bien.

Tal vez estamos en nuestro mejor momento y no lo sabemos, pero te pienso sonriendo y aunque recuerdo que todo esto podría ser imposible, lo sigo imaginando.

Lo escribo para no ocultarlo, porque de alguna manera no quiero olvidarme de este momento, nunca me he sentido tan feliz. 

Indiferente

Te dejé de querer desde hace mucho tiempo atrás, no te extrañaba y eso era una señal, aprendí a vivir sin ti y eso fue gloria, podría mentirte y escribirte diciendo que no te solté, pero cuánto ha costado y es momento de escribirlo, todo habría sido diferente, podía ser tu turno, pero esta vez si te culpo, culpo a tus idas y venidas, a tus vaivenes, a tu forma incierta de ser, de tus acciones dependieron mi olvido, es como si te hubieran pagado para hacerme eso y creo que pagaron bastante bien. 

Yo no te voy a hablar más, porque esta vez no quiero hacerlo, antes esperaba que me quisieras, que volvieras y que eso que llamaste amor se convirtiera en lucha para seguir con lo que alguna vez existió, pero ¿para qué? Si nunca fue mutuo, yo siempre remé sola, te acostumbraste a mi cariño, a que sea yo la que no falle, la que siempre ame, me cansé, y hasta me cansa tener que escribirlo.

Es increíble y no entiendo a donde se puede ir tanto amor, quizás al amor propio, bueno, me es indiferente encontrar respuesta ahora mismo. 

El joven

Voy a escribirte a título propio, por las risas y porque ya eres importante ¿qué rápido no? entonces como ya te quiero voy a empezar a correr (me río sola) 

No tengo nada preparado pero me habría gustado tenerlo, porque lo vales, pero es demasiado abrumador pensar que ya te quiero, entonces como todo el mundo está repleto de cariño, creo que ya no necesita el mío, el tuyo o el nuestro, me miento para que cuando te vayas, duela menos, pero ¿quiero que te vayas?, no, ahora no.

Y aquí empieza otra historia, siento que llegaste en el momento preciso, eres el espacio que mi vida aguardaba para reírme y sentirme querida, porque eso me haces sentir (qué fuerte), por mucho tiempo no había sentido algo parecido y es un poco raro, porque no es que ya te ame, también mentiría si dijera eso, solo te quiero y eso no sé si sea un buen comienzo, aquí hay varias oportunidades, como si esto fuera un juego, podría agradecer la calma y tanta atención, pero sé que es mutuo entonces no te agradezco nada (me vuelvo a reír) 

Estoy segura que si algún día lo lees, espero que sea con mi voz y la entonación que le doy a algunas cosas, te odiaría un poco si no lo lees así, pero tardo en sinceridad y solo quiero que lo leas.

¿De colores o de algún postre?

Día cero

¿Cómo empiezas a querer tanto a alguien? No sé si haya alguna explicación, me parece que no y que la única respuesta es que somos un tipo de especie que se adapta, que va más allá del amor si no que todo transita en la costumbre, ¿será verdad? Podría ser, no lo sé por eso lo pregunto.

He empezado a quererlo, no sé si mucho o poco, pero lo quiero y eso es un desafío que ambos tenemos, porque no nos podemos querer, no quisiéramos hacerlo, pero ya se hizo, entonces tenemos que volver a cero y ahí tengo otra pregunta: ¿cómo dejas de querer? - es así más o menos- hace años que no sentía nada por nadie y apareció como arte de magia, algo extraño, siento su perfume, sus manos, somos parecidos en mucho y en algunas cosas no, le gusta la cocina, yo soy malísima, se ha quedado con algunas cosas mías, no sé si las seguirá usando, pero no son cosas materiales, si no esas cosas del alma, esas que no regresan aunque las pidas.

Podría mentirle y decirle que todo va a estar bien, pero me va a costar, voy a luchar con su presencia incesante, voy a desarmarme una vez, desmoronarme para no volver a sentir, porque siempre pasa algo parecido a esto, siempre.

Siempre es el mismo final para todo, quizás si exista la suerte y esa la que quiero, no la tengo, quizás sea mejor empezar a buscar la respuesta de si algo hice mal, aunque no lo creo, también llegaste a quererme y eso no sé si esté bien.

Que el ok al final nunca se termine y que el uso de las palabras en mayúsculas siga siendo un tema solo de entonación para querer llamar la atención. Podría decirte que fue bonito mientras duró, pero no sé si hubo algo, la verdad que no entendí nada de lo que pasó, solo sé que pediste no quererme más. 

Con el alma

‪Repito una y otra vez la canción que decía ya no me dolía y te digo que eso me pasó por ahí en el 2018, y hoy 3 de abril del 2020 me duele de nuevo - ¿sabes por qué? - Tú siempre has tenido respuestas para todo, hasta para explicarme porqué te ibas.

Entonces la repito por cuarta vez para saber si me sigue rompiendo y así pasa, hoy siento ese dolor en el pecho, y como las palabras se quedan en mi garganta, como el sonido de esa canción retumba en mis oídos, quisiera que estés, que vuelvas, que no te vayas, pero eso sería humillante, yo ya te había olvidado o eso creía que había pasado, faltaban 15 minutos para las 6 y debía de concentrarme en cerrar algo del trabajo, pero no pude, -¿qué me está pasando?- siento como una angustia no me deja respirar y voy a darme un baño, quisiera que caiga más agua caliente porque así es como me gusta, pero el día se puso peor y solo sale de la fría, necesitaba cerrar mi mente y me hizo bien, o un poco bien, hoy vi llorar a Paula porque no es feliz, ¿lo soy yo? No lo sé, creo que no, por momentos sí, otros como este no.

Hoy siento como retrocedo ante esta batalla que pensé había ganado, se me rompe el corazón pensar que estoy perdiendo, porque también te estoy perdiendo, no quiero sentirlo así, pero pasa y revolotea mi cabeza, hoy empecé a leer las notas que te escribí y me preguntaba ¿de verdad todo el amor se me fue? ¿Cómo lo logré? Es que quizás le ordené a mi corazón que dejara de sentir, porque fue el quien te amó, y que no digan que no es así, porque era quien latía más fuerte cuando llegabas y quien sufría cuando te ibas, no te amé de otra forma, más que con el corazón y sin razón.

Me sigue apretando el pecho y siento que quiero llorar pero no lo hago porque pierdo algo que ya había ganado, la desilusión ya la viví antes, entonces mucho sentido ahora no tiene. Creo que sentirme así me pone en una situación de víctima y es lo que menos quiero, pero me alivia escribirlo.

Por si algún día lo lees, quiero que sepas que que me alivié con otras risas, pero que siempre anhelé la tuya, que extrañaba tus abrazos pero que siempre los esperé, un día te voy a contar todo, pero no así, y aunque no sepa cuando, sé que llegará ese día, por lo pronto seguiré escuchando nuestra canción, aunque no sepas cuál es.

Con el alma.

Te contaría

Te contaría de todos los planes que hice junto a ti, de las noches que esperaba para poder dormir a tu lado, me fui porque no hiciste nada por detenerme y aún a sabiendas de que esto no tiene futuro te escribo porque este corazón loco no te olvida, estábamos tan revueltos que no logré entenderte, te quiero, pero no así, no a medias, no puedo, aunque este punto final ha tenido varios puntos suspensivos te puedo decir algo concretamente: Perdóname por jamás comprenderte, yo solo te sabía querer.

Ya no importaba

Estaba preparando todo para salir con mis amigas, mis planes no eran verte y tampoco te había contado que estaría ahí, pero no todo podía ser felicidad y estabas en la fila, quería que la tierra me tragara en ese momento porque de las mil discotecas ¿tenías que ir a esa? me empecé a reír sola y avancé, estabas con una camisa blanca y un reloj negro muy grande, no recuerdo más porque traté de no mirarte, pero si te saludé porque aunque nos queríamos demasiado, todo nos había salido mal y lo sabíamos.

Estaba tratando de estar feliz porque para eso había ido y la verdad que si pude, entonces ahí me di cuenta que no todo fue tan malo y que estaba bien haberte visto, que no importaba si te volvía a ver, porque ya no incomodabas, porque ya no entristecías.

Todo avanzó mejor, la noche se convirtió en día y todos nos fuimos, yo estaba un poco feliz

¿Vamos?

Estaba pensando en que si todo esto pasa podríamos ir a tomar un café o esa cerveza que en por ahí en julio me dijiste, ¿te acuerdas? fue algo como, hay que vernos un viernes después del trabajo para seguir riéndonos, creo que ha sido una de las veces en donde tus palabras no fueron mentiras o eso quiero creer.

¿Qué haces ahora? ¿Aún sigues leyendo ese libro que te quedó pendiente? ¿Sigues durmiendo 2 horas al día? Hoy me atacaron los recuerdos y aquí me tienes escuchando algo un poco romántico y escribiéndote, no sé si sabes si es para ti, lo dudo, tampoco sé si me lees, no lo creo, pero aquí sigo escribiendo, tengo que confesarte que ya no te extraño tanto, hay otras cosas que agobian y no sé si eso sea bueno o malo, pero ha ayudado y eso ya es un avance, no sé en qué momento pude darte tanta importancia, no sé si la merecías, recuerdas que te dije que habría apostado todas mis fichas por ti, no sé si lo sostenga, esa es mi pena, porque yo siempre he sido coherente, pero esta vez siento que puedo decirte que no, se supone que por ti no deba de sentir nada, eso es lo que trato de pensar, pero veces como estas hacen que dude de lo que siento realmente, ¿crees que siento algo por ti? y si es así ¿por qué no apostaste por mí? - ya no importa - no le busco más respuestas a preguntas que nunca hice.

Como el arcoíris

En esta vida he tenido dos amores, el que creí que se quedaría para siempre y tú, el que vino a desordenar todo, hoy voy a escribir por ti una vez más, sintiendo como escucho tu voz cerca y no niego que me tiemblan las manos pensando que volveré a escribir por ti, hace tanto que no lo hago.

No fue mentira que te quise tanto, perdóname por negarlo, perdóname por no afirmarlo cuando pude, cuando me querías y quizás escribiría otra historia, perdóname por negarme a quererte, porque creí que nos hacíamos daño, más daño me hace no tenerte y no sabes cuanto te extraño.

He imaginado todo lo que podíamos haber vivido, los viajes, las salidas y esas conversaciones que no se dieron, esas que quedaron inconclusas porque no insistimos en lo que sentimos, porque quizás no luchamos, ahora no busco respuestas, solo desahogo de esta manera lo que hubiera querido que pasara.

La pregunta cae de tonta y es que tampoco hice nada para que te quedaras, entonces también es mi culpa y me alivia saber que fuimos los dos los que no luchamos, así siento que compartimos algo, que seguimos teniendo algo en común, hoy te extraño, te extraño tanto como cuando te dije que me iba y me abrazaste tan fuerte que solo lloré y ahora también estoy llorando.

¿Por qué no nos elegimos? ¿Por qué? Me hubiera ahorrado tantas horas de angustia, estaría contigo quizás siendo feliz y no lo hice, quien sabe por qué, te quería tanto y te dejé ir apresuradamente, no calculé espacios y vacíos.

Algunos días como los de hoy, reviso la libreta roja que me diste y veo lo que me escribiste, las notas y dibujos que dejaste, y me acuerdo de todo y quiero volver a la nada. Si Dios me da otra vida, que porfavor vuelva a coincidir contigo, quizás antes, más maduros y en mejores tiempos, podría ser que este si sea un para siempre.

Como el arcoíris, como siempre 💛